Una conciencia de Libertad Política Colectiva se alista en la civilización europea del siglo XXI, Francia, agosto de 2021.

 

Son ya muchas las revueltas sociales y movimientos callejeros reivindicativos de la Libertad, los que en este último año y medio hemos presenciado en todo el continente europeo, incluido Reino Unido que considero Europa no por sus condiciones políticas ni jurídicas sino por su situación geográfica, gracias a la proclamación gubernamental de prácticamente todos los consejos políticos de todos los países europeos de la llegada de un virus aparentemente mortal, pero que trae consigo una infinidad de contradicciones en el sentido práctico protocolario de la sanidad como también en todo lo que respecta a las restricciones jurídicas y gubernamentales de prácticamente todos los países del continente (hablo del continente europeo por tenerlo más a mano que el resto de países del mundo aunque también podríamos incluirlos a todos).

 Para aquel que no quiera vivir de creencias y composiciones de lugar personales en cuanto a lo que acontece política y socialmente en la Europa del 2021, nos tenemos que centrar en un concepto, que es precisamente el motivo de reivindicación de la población en la mayoría de las grandes ciudades europeas, ese concepto es el de la Libertad Política Colectiva, un gran término que por el peso vital que trae consigo en los individuos, marca la calidad de estos como ciudadanos de una sociedad, desconocido y apartado del conocimiento público y de ninguna institución de la enseñanza en prácticamente todo el mundo.

 

Está sucediendo en el aspecto sociológico del continente, una ligera apariencia de situación prerrevolucionaria en las sociedades, al contemplar de la noche a la mañana una brusquedad de cambio en la rutina y la vida social cotidiana de los europeos con la escusa de un virus, que como decimos trae más ruido que nueces, pero que en cambio las restricciones gubernamentales, distintas entre ellas en cada país que vayamos, son de una envergadura tal, que influyen directamente en esos derechos y libertades individuales que se poseían a la vista y se consideraban en la ciudadanía. Lo que nadie sabe ni se fija es, que todos esos derechos y libertades individuales, como podemos contemplar, no están garantizados, se embargan y se cambian al paso de los días y acontecimientos según en son de los intereses de gobierno particular de cada país, es decir, no están garantizados, y no están garantizados porque realmente las libertades individuales y los derechos no significan Libertad en singular y en mayúsculas. Es tanto así, que donde haya derechos jamás habrá Libertad, pues un derecho es simplemente un permiso o autorización concebida por un poder supremo, esto es, que, igual que las dan, como vemos las quitan con una facilidad extraordinaria. Nadie es consciente que la Libertad Política, para ser verdaderamente libertad debe y tiene que ser colectiva, colectiva es de todos, siendo alguien no poseedor de esa Libertad en mayúsculas ya no lo será nadie, quiere decir esto al contrario de lo que entendemos por libertad, que la libertad de uno la constituyen todos los demás individuos de esa sociedad, de ese país, ya que cada país tiene su personalidad en todos los aspectos. Ser consciente de lo que es la Libertad Política Colectiva es saber que todos los derechos y libertades individuales, leyes fundamentales y hasta la propia constitución de un país, nace y se fundamente en esa Libertad Política que debe de ser colectiva ya que al ser colectiva es constituyente de todo lo demás, es la madre del cordero, hasta tal punto que sin ella todo lo que vemos es falso. Es preciso señalar la gran confusión en la que viven millones de personas pensando que son libres porque tengan derechos y libertades individuales; y hasta podemos oír la barbaridad típica y tópica de, “tu libertad empieza donde acaba la mía”, algo que no tiene nada que ver con la Libertad en singular como vemos, pues esa frase se referirá a derechos o posesiones materiales individuales, pero no a la Libertad en mayúsculas.

 

Sucede en Francia, que se puede palpar y respirar algo que no se ve tan claro en otros movimientos sociales en otros países. Dados los acontecimientos de manifestaciones y revueltas en las calles de las grandes ciudades del territorio nacional debido a las restricciones tras la alarma vírica, ya desde el principio de este acontecimiento de carácter vírico el pasado año, pero sobre todo aun con mucha más intensidad varios meses atrás, no sabría decir exactamente cuánto tiempo, pero sí podemos decir y especificar que desde el dictamen de las restricciones que el presidente Macron ha sancionado para la vacunación obligatoria en cuanto a la entrada en determinados lugares y el pasaporte especial sanitario así como la obligatoriedad de vacunación del personal sanitario, podemos observar que todos los fines de semana, miles y miles de personas en las grandes ciudades francesas van al unísono de la protesta. La noticia hace varias semanas en el mes de julio es la siguiente:

_”El Parlamento francés aprobó este domingo la ley del pasaporte sanitario para vacunados contra el covid-19, tras un acuerdo entre legisladores de las dos cámaras. La votación se produjo un día después de que Francia se ve sacudida por protestas contra las reglas sanitarias, con más de 160.000 participantes en todo el país. El presidente Emmanuel Macron ordenó la semana pasada que el pasaporte sanitario, que sirve de constancia de la vacunación completa o prueba negativa de covid-19, será obligatorio para los franceses que quieran ingresar a sitios como cines o discotecas. El anuncio fue parte de una acción de Macron por hacer de la vacunación una arma clave contra el covid-19 ante el surgimiento de variantes, al obligar a las personas a vacunarse si quieren continuar con sus rutinas diarias. Tales medidas fueron adoptadas por decreto, pero el Parlamento se enfrascó desde el martes pasado en una sesión maratónica para decidir si las convierte en ley. El pase sanitario enfrenta una dura oposición de algunas personas que consideran que erosiona las libertades civiles. El partido de gobierno enfrentó dificultades para lograr la aprobación legislativa. Macron tiene mayoría en la Asamblea Nacional, pero el Senado está dominado por la oposición derechista. El Senado aprobó la legislación pero incluyó varias enmiendas que, según el gobierno, limitan su impacto. Ante ello, las dos partes se reunieron el domingo durante tres horas hasta alcanzar un acuerdo para aprobar la ley en horas de la noche por amplia mayoría. La legislación aún debe ser ratificada por la máxima autoridad administrativa de Francia, el Consejo Constitucional, antes de convertirse en ley, un paso solicitado por el primer ministro, Jean Castex”_.

A este mensaje gubernamental le proceden numerosas manifestaciones como esta:

 

_La primicia es que hace dos días y tras las numerosas manifestaciones a lo largo del territorio nacional en las grandes ciudades ocurre esto, en concreto el domingo primero de agosto de 2021, una mayoritaria parte del parlamento, más en concreto son 108 votos en contra y 100 a favor del Pasaporte Covid o “ Green pass”, el Pasaporte especial queda cancelado de momento a la espera de las decisiones del Ejecutivo_.

 

 Es palpable, latente y evidente, una conciencia de colectividad en el sentido de dichas manifestaciones, viendo incluso casos de agentes de policía acompañando a la muchedumbre queriendo significar el rechazo a quien dependen y deberían obedecer que es al Estado y poder Ejecutivo. La distinción notable con otros países y naciones, es el carácter uniforme que se aprecia en los movimientos populares con los resultados parlamentarios, lo que marca la diferencia con otros países del continente. Resuena en Francia un instinto de colectividad tal, que me da la impresión de que van por el camino de darse cuenta por ellos mismos, que la Libertad Política, que ya la practican mediante el elemento representativo de la elección de diputado de distrito para el parlamento, para que sea libertad en singular y mayúsculas debe de ser COLECTIVA y así ser CONSTITUYENTE, pues días atrás el mismo parlamento ha elegido en peso de la mayoría que el pasaporte no sea algo impuesto, aunque a la espera de lo que sancione el Ejecutivo, pero el hecho político del asunto es, que ya en el parlamento se ha dado un paso al cambio de un dictamen del gobierno, y que esa elección parlamentaria coincide y va al paso de las personas en las calles de las grandes ciudades, los franceses son conscientes de que unidos se puede, de que la Libertad Política Colectiva está ahí, en algún lugar cercano de su conciencia y conocimiento, y el hecho verdadero es que lo están descubriendo y acercándose ellos solos, el pueblo unido en una, no luchando contra gobiernos mundiales ni agendas globalistas, devolviéndole la moneda al poder con poder, es decir, haciendo política, que es la lucha literal por el poder. Algo que remarco aquí como imprescindible para entender la política es, que como ejemplo que está dando el pueblo francés, para que exista política al poder hay que combatir con más poder, y ese es el hecho político y el ejemplo que está dando el pueblo francés al resto del mundo de pueblo social y políticamente más avanzado que el resto; saben lo que es la Libertad política porque la practican, en Francia hay representación política, hay parlamento, se elige diputados de distrito, pero lo más importante es el descubrimiento que tras la acción colectiva de los ciudadanos están descubriendo y es, que la Libertad no es Libertad si no esta de manera colectiva en la conciencia de todos los ciudadanos y están averiguando que siendo así se puede hacer política, se puede elegir y se puede decidir el futuro de una nación.

 

Estaremos, como no, al tanto de los acontecimientos tanto en Francia como en otros países de Europa y reconociendo la realidad política y social, en lo que esté en nuestras manos, de cada país que es distinta de cada cual naturalmente dados los intereses particulares de cada gobierno y nación. Por ejemplo uno de los hechos políticos, al igual que pudimos vivir hace poco con el Brexit en Reino Unido, que se resumía únicamente en el asunto de VISADOS y el rechazo de una mayoritaria parte de los insulares de Reino Unido (UK) a no compartir los Visados de la zona Schengen, haremos un adelanto en este artículo explicando que hoy, en ciertos países de Europa lo que realmente se está viviendo con la excusa de pandemia viral es un control de visados y restricciones en las fronteras como decimos de algunos países europeos. Un adelanto es, que la pandemia tiende a ser y a atender más a asuntos de EMIGRACION y no de virus.

 

 

Mientras tanto en España…

 ¿Saben ustedes qué es eso de la Libertad política?,¿y la conciencia nacional? En España no existe porque no hay ni Libertad Política ni Representación política, por eso en España no se puede hacer nada, porque nadie elige absolutamente nada en la urna. No se eligen personas, se votan partidos estatales, órganos del Estado que no representan a la Nación porque se deben y miran por los intereses del Estado, que es quien les paga. En España no hay parlamento porque los diputados no les eligen el pueblo persona a persona, les pone ahí el jefe de partido en las listas y se deben a él y hacen lo que diga el jefe, son empleados a sueldo con dinero del contribuyente, ni siquiera se deben al partido. El parlamento, el Congreso de los diputados en España, no sirve absolutamente para nada, lo que entra ahí es lo mismo que lo que sale de ahí, es lo que diga el que está de presidente en el banco azul, no hay más, lo demás es el teatro que los españoles se tragan o se quieren tragar. El elemento representativo es tan vital como que es el ejercicio de la Libertad Política del ciudadano de elegir, al menos, a su representante en el parlamento, al que conoce y puede pedirle cuentas, de ahí la diferencia entre ciudadano y siervo voluntario, que el papel de la urna sea para elegir no para refrendar lo ya que han elegido otros.

 Si nos vamos a lo que respecta a tener una conciencia nacional, es decir, como nación, es decir COLECTIVA, pues es evidente que la amalgama que desprende de mentira, corrupción moral, tradiciones y costumbres tan recalcitrantes como vivir en una Monarquía de partidos de origen franquista y votar a partidos legitimado con el poder de Franco repartido en cuotas, y aun depender de un papel mojado, una carta otorgada que como documento jurídico no tiene validez alguna ni nunca estuvo en vigor y que responde a una REFORMA de las Leyes fundamentales del Reino de la dictadura de Franco, siendo esta realidad única y última de la que pende el pueblo español, sumado y de la mano a su tradición servil y de obediencia ciega, podemos decir que en el terreno de la política, de la conciencia de nación y sociedad, de colectividad, estamos a años luz de saber lo que es ser un verdadero ciudadano libre, es decir, que no es de extrañar, que cualquier títere de las oligarquías europeas pueda ser presidente de los españoles y que se dicte lo que se dicte desde el gobierno en funciones, sea justo o no, sea racional o no, o sea como sea, será obedecido y compartido por una mayoritaria parte de los españoles, aunque veamos como unos días atrás vimos en ciudades como Madrid y Barcelona algunos movimientos reivindicando libertad, movimientos que no tienen ni tendrán la mayor repercusión política en absoluto, y menos si lo que se reivindican ahí son razones sustanciales y ficticias sobre agendas globalista y poderes mundiales. Y esta es la prueba de que, en España no existe la política ni se sabe que es la política, el poder único soberano del Estado no tiene oposición política, porque de serlo así, sería la nación española, el pueblo en conjunto y de manera colectiva en conciencia el que responda ante las sanciones gubernamentales. En España, ni hay Libertad Política porque la tienen los partidos que son los que se reparten el poder y son los que pactan para mantenerlo, tampoco hay ni existe el elemento de representación porque ni la forma de gobierno ni el sistema de elecciones proporcional de listas es representativo de nada ni de nadie y tampoco hay conciencia de ello ni se sabe lo que es. Tampoco hay conciencia nacional. Se rechaza al vecino solo por la vestimenta como para compartir conciencia colectiva de ciudadanos.

 

Antonio HR, a 2 de agosto de 2021.

 

Un comentario de “Francia y la conciencia de Libertad Política Colectiva

  1. Daniel Prieto dice:

    Felicidades por el artículo. Qué envidia me da la Nación francesa. Ojalá y copiemos esto como nos gusta hacer con otras cosas. No somos muchos aún, pero los números aumentan día a día.

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