Soy español
Confieso que la conquista de la Libertad Política Colectiva es un objetivo que me apasiona. Con frecuencia, suelo moverme por las redes sociales contactando con personas que tienen ese mismo objetivo. Encuentro de todo. Personas que tienen un conocimiento riguroso, certero, y claro, y otros de forma mucho más intuitiva, otros que van indagando y que poco a poco van clarificando los conceptos. Yo soy de esos.
Me gusta enormemente aprender sobre todas estas cuestiones. Tal vez sea por eso, que mi presencia en las redes sociales sea fundamentalmente para aprender. Un poco de aquí, un poco de allá, voy aprendiendo cada vez más. Intercambio conceptos, los desarrollo, profundizo con unos y con otros. Disfruto mucho con ello. También he notado, que hay algunas personas, entre las que tienen totalmente claros estos conceptos, hacen comentarios del tipo: “Los españoles son tontos” o “Los españoles son ignorantes” y cosas así. Estas reacciones, a veces, me dejan muy pensativo. Esas expresiones la emplean españoles. Aunque si son españoles podrían decir: “Nosotros los españoles somos ignorantes, o tontos o idiotas”, y es como si mientras lo dicen, ellos dejaran de ser españoles. Yo soy español. Me resulta llamativa esa actitud que cada vez percibo más.
Don Antonio García-Trevijano Forte, sabía todo de Ciencia Política y todo en el ámbito del Derecho. Tal vez no sabría nada de fontanería, de instalaciones eléctricas, Geología, Cálculo matricial, anatomía forense, y muchísimas cosas más. Pero ignorar todas esas cosas, no lo convierte en un ignorante. Todos los hombres ignoramos muchas más cosas de las que sabemos. Y por eso, el hecho de que alguien no sepa algo que yo sé, no lo convierte en ignorante, tonto, idiota o imbécil. Si, ciertamente, hemos de instruirnos permanentemente. Es posible que esté equivocado, pero intuyo que es en España donde hay más personas que saben que en su Nación no hay democracia. Incluso muchas más que en Italia, o en Alemania, o en Suecia, etcétera.
Creo que la conquista de la Libertad Política Colectiva es una cuestión, sobre todo, de ideas claras, perseverancia y voluntad y de unos pocos. Las masas van de un lado a otro en segundos. Es lo que llamaba Don Antonio García-Trevijano Forte, la indignación. No es que las personas que participan en ella sean más tontos que los que no nos integramos en ella; es que la emoción y la confusión, son tan contaminantes en nuestros días que incapacitan la razón. Comentaba San John Henry Newman: “Esto es lo normal en la masa de la gente, en todos los tiempos: dejarse influir por miedos repentinos, arrepentimientos repentinos, propósitos repentinos, decisiones repentinas, que desaparecen repentinamente …. La multitud es así, inestable, como el agua, y nunca mejorará. Un día grita: “¡Hosanna!”, al siguiente: “¡Crucifícale!”.
Por eso hemos de trabajar siempre en unión inquebrantable, por ese tercio Laocrático, del que Don Antonio nos hablaba, lo demás, cuando llegue el momento, lo tendremos de nuestra parte, por eso mientras tanto, aprenderemos a emocionarlos; a emocionar a esas masas tan vulnerables a la indignación. Recuerdo como las masas fervientes del generalísimo Franco en Andalucía, pasaron de un día al siguiente, a ser las más socialistas del mundo. Pasaron a ser socialistas de toda la vida.
Antonio Sebastián Aragón Gotarredona, 28 de septiembre de 2020.
Coincido plenamente. Algunos parecen elevarse sobre los demás por el hecho de haber comprendido la realidad política. Yo estoy en el campo de los que aprenden todos los días para poder transmitir ese aprendizaje a otros.
¿De qué sirve ser el más listo o el más entendido en esta lucha si la libertad sólo puede ser colectiva?. Gracias.
exacto, supongo que es ego o ganas de protagonismos, realmente la libertad no se pregona o se vende, se muestra y lo demas es algo de la moral y conciencia de cada uno.
Espero estar en ese campo contigo